Ya se están vendiendo los primeros décimos para el Sorteo Extraordinario de Navidad, y aunque queden todavía un par de meses para que se celebre, muchas personas que ya han adquirido los primeros décimos de lotería han comenzado a soñar con que les toque el ´Gordo´ este 22 de diciembre. Alguno puede que haya dejado listo hasta el champán con el que va a celebrar ese momento en el que uno de los niños o niñas de San Ildefonso canta el número de su boleto. Sin embargo, lo que seguramente no se le haya pasado por la cabeza todavía es qué cantidad se va a quedar Hacienda del premio.
No en vano, en enero del año 2013, se estableció que los premios más altos de la Lotería de Navidad, es decir los que superen la suma de 2.500 euros, tengan una retención del 20%. El Ministerio de Hacienda consideró en su momento esta medida como "justa", puesto que tiene el objetivo de reducir el número de fraudes que se realizan para blanquear dinero a través del sorteo de lotería navideño.
A pesar de ello, el jugador de lotería no tiene por que preocuparse sobre cómo hay que declarar este premio. Una vez se cobre el dinero en cualquier administración de lotería, allí se descuenta automáticamente la cantidad que corresponde a Hacienda. De esta forma, una persona que ha resultado ganadora de la Lotería solo tendrá que tributar si realiza una inversión con el premio y resulta beneficioso para él, aumentando a su vez su patrimonio.
Así pues, si quieres calcular qué parte de lo que has ganado va a ir a parar a la Agencia Tributaria, en primer lugar, deberías restar al dinero del premio 2.500 euros, ya que esta cantidad no tributa a Hacienda. Después, hay que aplicar el 20% que se retiene a la cifra de ganancias que quede tras hacer la resta anterior.
De este modo, la cantidad real que uno puede ganar por los primeros cinco premios que se sortean el 22 de diciembre sería la siguiente: en el caso del ´Gordo´, que reparte 400.000 euros al décimo, se quedaría en 320.500 euros; el segundo premio pasaría a ser de 100.500 euros; el tercero se iría de los 50.000 euros iniciales a los 40.500 euros; por el cuarto se percibirían finalmente 16.500 euros; y por el quinto la cantidad que quedaría tras los impuestos sería de 5.300 euros.
Por otro lado, esto no sucede obviamente en el caso de las pedreas y las aproximaciones. En estos casos se cobra todo el premio, puesto que ninguno de ellos supera los 2.500 euros.
